Da la sensación que mendigamos comprador

Creo, con toda sinceridad, que volvemos a hacer el ridículo y que, nuevamente, estamos siendo el hazmerreir de propios y extraños con el tema del aeropuerto y esta vez ya no es porque esté cerrado, se haya construido sin estudios reales y posibilidades de rentabilidad, sino porque da la sensación que estamos mendigando un comprador.

A uno, servidor que lleva muchos años leyendo y escribiendo en los medios de comunicación, esta situación le recuerda la que vivimos hace unos años en Burriana en la que un grupo de “malayos” vinieron a esta ciudad para presentar un proyecto para el Arenal y todo quedó, para la población, en agua de borrajas, aunque algunos consiguieron lo que querían, notoriedad, fotos y recalificación de terrenos para beneficiar sus intereses. Después de las presentaciones y de las fotos de rigor, ahí queda eso “el Arenal per al poble” o tal vez deberíamos decir “el Arenal per al Sound”, porque en realidad ese es el único uso que se le da, además del mercado matinal de los domingos.

Confío que el “Aeroport de Castelló” no sirva para eso, para recinto de festivales o para la realización semanal de un mercado, aunque de esa forma tendría un uso, a pesar de que yo prefiero que corran coches y motos por sus pistas, al menos eso es una oferta diferenciada.

En fin, nada, que los libios, están los libios para eso, no han dado señales de vida; nadie los conoce; no hemos visto, todavía, fotos de sus rostros y como siempre digo, me gustaría equivocarme y que aparecieran, que presentaran los avales correspondientes y que la estructura no llegara a su tercer cumpleaños sin que en sus instalaciones recibieran a miles de turistas de todo el mundo ávidos de conocer nuestra provincia cuyos recursos son muchos están, casi, vírgenes y son capaces de satisfacer las exigencias y curiosidades de quienes nos visiten, eso sí, siempre que sepamos venderlos bien, porque la política turística provincial es algo que deja mucho que desear.

Me da lo mismo que sean malayos, libios sumerios o de Vilafranca, lo que hay que hacer es que en el tema del aeropuerto haya una única voz, que se trabaje con claridad y con personas que transmitan esa claridad y no esos claroscuros; que se tengan los objetivos definidos y que quienes tengan responsabilidades tengan la mano suficientemente decidida para poner al frente de ese organismo a alguien que transmita la claridad de los objetivos previstos y no que deje entrever las turbulencias económico-empresariales-político-sociales de un haber que no tiene más futuro que el chantaje para mantener la cuota de poder.

Leo que a finales de año podría abrir el aeropuerto para recibir vuelos. Ese sería mi deseo y sin duda el de miles de ciudadanos de nuestra provincia que estamos cansados de que se mofen de nosotros no por lo dicho, sino por lo hecho y hacerlo, lo hemos hecho nosotros. No me extraña que después de lo hecho por nosotros, se rían de nosotros.