joan llido

  Señor alcalde de Burriana: Ni un día de tregua le han dado en el Ayuntamiento, mejor dicho, ni un segundo de tregua, dado que en el propio pleno de investidura le han dado de lo limpio por el lado que no esperaba y en una sesión que, por ser la primera y la protocolaria toma de posesión, se supone que es, un poco, de guante blanco. Sin embargo, las críticas y los golpes no le han venido por donde algunos lectores que no han visto la sesión, podía esperar, le han venido de parte de aquellos con los que usted se había sentado a negociar un pacto de gobierno para tener cuatro años de estabilidad y de tranquilidad. No obstante, no es, solamente, lo que dijeron, sino también como lo dijeron desde ese grupo de ultraderecha que en el ayuntamiento de Burriana ha duplicado el número de concejales gracias a los designios de sus propios ciudadanos que han tenido la libertad de elegirles como sus representantes. Si se analizan las palabras y la forma de decirlas se encuentra mucho rencor y,

  Acababa de ver un nuevo episodio de ese programa que emiten en la dos que se llama “cachitos de hierro y cromo” y entre las muchas canciones que escuché estaban “Noelia” de Nino Bravo, “Mi querida España” de Cecilia y “USA for Africa” pero primero en Apunt había visto la entrega de premios de la asociación de actores y dobladores valencianos en donde pude oir y recordar, en boca del Grup Carraixet, la canción de Lluís Miquel “Us adoneu” con la que le rendían homenaje por su reciente fallecimiento. Decidí salir, faltaban sesenta minutos para la medianoche. Cogí al canido y salimos. La calle estaba solitaria y tras miccionar, el perro, en algunos setos y árboles del entorno, me adentré en una calle peatonal cuando me encontré con una persona, uno de esos negociadores que lo hacen para conquistar el poder, que regresaba de esa que se espera sea, siempre, la última reunión antes del acuerdo. Como somos conocidos, le pregunté por la marcha de las mismas. Sin querer soltar prenda, al m

  Pepe ya tiene lo que quiere. En su día puso a un títere al frente de una empresa y él, ahora, recompensa a ciertos amigos poniendo de encargados de sección de la misma a aquellas personas que son los amigos del primero, le adulan y con ello le deben favores de cara al futuro en el que, el ínclito, va a pretender ser el presidente del consejo de administración con la finalidad de hacerse con el poder dentro del holding. Eso es lo que ha hecho un conocido personaje del mundo empresarial para afianzar su poder económico, rodearse de personas afines, sin ambiciones laborales; se deja aconsejar por inexpertos a los que únicamente les une el interés de mandar sin el más mínimo interés empresarial y ante todo esto me surge la pregunta de ¿A quien va a beneficiar? A la corta a los enchufados de turno pero, a la larga, quien más a perder va a ser la empresa a la cual han entrado olvidándose del pasado de la misma, importándoles, únicamente su interés personal en este mismo momento y sin p

  Yo no gano siempre, pero tampoco siempre soy quien pierde y, sin embargo, me gusta respetar, tanto a quien gana como a quien pierde. Esa es una primera reflexión que me surge ante un debate que estoy viendo en televisión. No obstante, me da en la nariz que no son muchos quienes saben perder y, tampoco, quienes saben ganar, que en ocasiones, estos últimos, no saben respetar a quien   pierde, al menos según ese criterio del ganador frente al perdedor. Sin embargo, no obstante, a pesar de todo, me J… mucho que uno de los dos, bien el ganador o el perdedor, ante un resultado que pueda resultarle adverso, ponga en duda el propio sistema, máxime, si este es un sistema democrático consolidado y considerado, a nivel internacional, de los más transparentes que existen en este globo que a alguien se le escapó un día. Estamos a un paso de que gobierne la derecha de ese señor gallego que atiende a los parámetros de, como dice mi amigo que vive en Madrid, a la sazón capital de este Estado l

  A casi una semana de les elecciones municipales i puesta distancia entre la ciudad que me acoge y otras poblaciones más al interior , en las que he estado, he intentado hacer una pequeña simbiosis de lo ocurrido con el resultado de lo acontecido en Burriana y de los resultados obtenidos por las diferentes fuerzas políticas municipales. Dicen que lo que se siembra se cosecha. Que quien siembra vientos recoge tempestades y, a la vez, otros diversos refranes que pueden explicar, con rapidez, lo ocurrido y, pienso, que no se pueden hacer tan rápidas afirmaciones en una situación como la vivida en la que, con los resultados en la mano, la única fuerza ganadora ha sido la extrema derecha. Menos mal, que el equipo de gobierno ha hecho cosas en los últimos ocho años, a diferencia de otros equipos anteriores que se limitaron a cobrar a fin de mes. Sin embargo, y a pesar de lo realizado ¿Dónde ha estado el fallo del equipo gobernante? Puede haber muchas explicaciones pero, para mí, el pr