joan llido

No me gusta el futbol como movimiento de masas aborregadas; ni me gusta la política como adoctrinamiento de personas; ni las banderas y los himnos como elementos de separación de territorios y personas, pero tampoco me gustan los fanatismos de los futboleros, ni los extremismos de quienes utilizando banderas, himnos y territorios pretenden lo que, por Ley, podrían conseguir, pero que por sus actos quedan totalmente deslegitimados. Tampoco me gusta la mala educación ni que unos insulten a otros u ofendan los sentimientos de quienes tienen himnos y banderas como enseñas de algo; no me gusta que se radicalicen posturas, ni que se generalicen conceptos, pero tampoco me gusta que ofendan a nadie amparándose en un falso concepto de la libertad de expresión que, casi siempre, tenga un único sentido; la libertad de expresión, de religión, política, etc. siempre tiene dos sentidos, tú me respetas y yo te respeto. No me interesaba, lo más mínimo, la final de la Copa del Rey, pero quería

Tras la tormenta, algunas veces, llega la calma y tras la calma, de vez en cuando comienza la tormenta. Dos días después de celebrarse las elecciones municipales la calma se cierne sobre los grupos políticos de Burriana; a cuarenta y ocho horas de conocerse los resultados electorales las aguas siguen calmadas, los teléfonos, aparentemente, no han sonado y todo sigue igual, supongo que a expensas de que alguien mueva ficha e indudablemente quien la mueva primero, puede llevarse el gato al agua, traduciendo, puede hacerse con el sillón de la alcaldía. Estamos ante una situación curiosa, muy lejos de ser lo histórica que algunos preconizan, al fin y al cabo esta, no es una situación nueva, lo que pasa es que con tantos años, en Burriana, de gobierno popular, nos habíamos acostumbrado al ordeno y mando del grupo más votado y por ello se creía con el máximo derecho de imponer su voluntad, muestra del talante nada tolerante de las personas que nos han dirigido. Ahora, independienteme

Dedicado para todos los burrianenses optimistas https://www.youtube.com/watch?v=blbxLbTO5fk

Querida alcaldesa de Burriana, y digo alcaldesa porque como ya escribí hace unos meses, creo que la alcaldía de Burriana requiere, por muchas cosas y sensibilidades, un cambio de sexo. Pues eso, alcaldesa, me gustaría que en la legislatura que va a comenzar Burriana, tu pueblo y el mío, como decía el poeta salvando la distancia geográfica, viva el cambio que necesita; seas capaz de darle esa visión femenina que los hombres que nos han gobernado no han sabido darle ni infringirle. Es más, la han sumido en una ciudad triste y dormida y eso, a algunos no nos gusta. Te voy a pedir cosas sencillas que mejorarán, desde mi punto de vista, la vida de nuestros ciudadanos o, al menos, embellecerán esta población nuestra de cada día y también de cada noche, que por cierto en Burriana es muy oscura gracias a la mala iluminación que tienen algunas calles y plazas. Apreciada “M”, y digo esto porque entre esas comillas está el nombre de la alcaldesa, al fin y al cabo el nombre de las posibl

Hay “salva patrias” que quieren salvar patrias insalvables; patrias que no quieren que se las salve y patrias que no merecen ser salvadas. Pero, también hay patriotas que esconden, tras la aparente piel de cordero, un feroz lobo ansioso de devorar patrias sin merecimientos; patriotas de boquilla y patriotas de bolsillo o mejor dicho, con bolsillo lleno o con este objetivo. Menuda reflexión acabo de hacerme, no sé si será por el tema de las elecciones municipales o por qué, pero me he puesto muy trascendente, sin embargo, creo, que lo que acabo de decir es verdad o, al menos, a mí me lo parece. No obstante, busco el significado de la palabra “salva patrias” y no me aparece en el diccionario de la academia, pero es como lo de las “meigas” que haberlas, “haylas” y, algunos, nos quieren salvar de patrias inexistentes, de patrias inducidas o de aquellas patrias a las que ellos mismos nos han inducido y conducido, además de haberlas creado y producido. Sin embargo, o a pesar de ell