Les Alqueries del Ferrer, cultura, historia y tradición

Un año más, y la historia es larga, les Alqueries del Ferrer de Burriana cumplen con la tradición de celebrar su fiesta el último fin de semana de septiembre, una fiesta cuyos orígenes se remontan a muchos años y que sirven para poner el punto y final a un estío, raro y todavía caluroso, a pesar de estar ya inmersos en pleno otoño.

Ayer domingo, una gran cantidad de personas estuvieron presentes en este entrañable lugar del término municipal, arropados bajo la sombra de los viejos pinos que con sus raros y extraños troncos cobijaron a quienes quisieron disfrutar de un caluroso día que, seguramente y según anuncian los meteorólogos, pondrá el broche de oro a un verano que con la festividad de la Sagrada Familia, advocación a la que está dedicada la ermita del lugar, cerrará un ciclo anual para adentrarnos en la dinámica normalidad a la que nos somete el otoño y el invierno.

Muchos años ha, que me encontré con esta fiesta y con los habituales que la frecuentan, algunos han ido quedando en el camino como Pepe el Bello y su hermana Finita, las hermanas Calvet, Ismael Beltrán o Pepe Vilana, otros todavía asisten de forma frecuente y reiterada para honrar esta fiesta sencilla pero entrañable que se sumerge en las raíces de un pueblo que se resiste a perder, acto muy loable, lo más entrañable que se posee, la convivencia con el resto de vecinos.

Cena y cantos durante la noche del sábado, misa, paellas y subasta de objetos para el domingo y comida de hermandad con muchos propietarios de la partida del término municipal durante un lunes, hoy mismo a la que acudirán las autoridades civiles, económicas, militares y agrícolas de la ciudad para compartir un vermouth a base de higaditos con los regadores y otras personas dedicadas al cuidado de los campos y después disfrutar de una suculenta paella guisada con leña.

Hoy, un año después de la última fiesta, nos volveremos a reencontrar con la cultura popular y nuevamente se volverán a escribir unas líneas de la historia local, aunque esta localidad carezca de historiador que la escriba, aunque la invitación cursada al Magnífico no se haya hecho extensible a todos los miembros de la Corporación y aunque a pesar de ello la historia continuará escribiéndose.

Hermosa y entrañable fiesta la de Les Alqueries del Ferrer, dentro de un rato una cerveza y algo más serán motivos de charla entre muchas personas que reafirmarán la cultura de una población que nuca debería perder sus raíces.