In memoriam Biot
Hoy los olivos centenarios de la Sierra Espadán han
llorado unas lágrimas de su mejor aceite cuando despuntando el alba se
enteraban de que quien mejor les pintó, nos había dejado.
Hoy los amantes de la naturaleza y de esos paisajes, en
su mayoría de veces, reducidos a un extorsionado tronco de olivo nos hemos
quedado un poco huérfanos, ya no sólo por lo buen pintor que era, sino por la
excelente persona que escondía ese cuerpo cuyo oxígeno era prestado y cuya
bondad de sus donantes nunca se cansó de agradecer.
Hoy nos ha dejado Pepe Biot, buen pintor y mejor persona,
amigo de sus amigos y un enamorado, hasta la médula, de su esposa Rosa, de sus
hijos y de sus nietos.
Ya has traspasado el umbral temporal para adentrarte en
esa incierta eternidad en la que habrás encontrado a los grandes de la
historia, a tus amigos que te precedieron y a muchos que admiraron tu calidad
artística y humana.Pocas o muchas cosas se pueden decir de alguien cuando nos deja, yo sólo quiero decirte, Pepe, gracias por haberme dejado conocerte.
Comentarios
Publicar un comentario