A vueltas con el corredor Mediterraneo

En este País en el que vivimos, el más cercano, el más nuestro, ese en el que habitamos los valencianos y en el que nos gobiernan quienes nos gobiernan, parece que los problemas son eternos y para la eternidad y al mismo tiempo, siempre, manipulados por los intereses particulares de los grupos dominantes.

Hay temas de los que venimos hablando desde hace muchas décadas, el doble de lustros y un sinfín de años; esos temas, entre otros, podrían ser el agua, las conexiones con Europa, ahora llamado corredor Mediterráneo, gratuidad de autopistas y autovías, regeneración de la costa, y financiación, además de otros puntos que los incluimos dentro de este etc.

Ahora, después de tanto tiempo y en este momento en que parecía que el corredor Mediterráneo iba a ser una prioridad, se alzan otras voces reclamando el corredor central, no sé que entienden por corredor central, pero si es el que une Francia con Zaragoza, Madrid y Sevilla, sólo falta el tramo de Barcelona a la Frontera, será que los mañícos no lo tienen ya o que a la señora de Cospedal el AVE no le llega a todas las capitales de provincia, Toledo, Cuenca, Ciudad Real o Guadalajara, vaya marginados que los tenemos.

Yo creo, que ya está bien, y ya sería hora que los valencianos, es decir todos los que habitamos por este País, digamos ¡Basta Ya! y empecemos a reivindicar de la mano de nuestro presidente Alberto Fabra, pero sin complejos, algo que sus antecesores no supieron hacer y es dejar el victimismo de lado para comenzar a exigir lo que se debe exigir, inversiones para incrementar un tejido productivo no basado, casi exclusivamente, en la especulación y ello pasa, ineludiblemente, por el corredor Mediterráneo, un espacio natural en el que durante muchísimos años se ha basado el crecimiento económico de ese otro país más general que se llama España.

Y si decimos ya está bien, hay que decirlo con la boca llena y con el convencimiento de que eso es lo mejor para el “bien general” y si es preciso poner lo que hay que poner en el lugar que lo hay que poner, es decir hablando aprisa, “los cojones encima de la mesa” para defender la colectividad más inmediata, si no es así, volveremos a repetir los mismos errores y a conseguir los mismos logros.

Y yo no sé que me pasa que al hablar de estos problemas enquistados de carácter general, me llega a la memoria otros más cercanos referidos a la carretera del puerto, el Arenal, la carretera de Vila-real a Burriana, la regeneración de la costa y otros, ¿será que están también enquistados?