Los indignados pueden producir indignación

Al final, terminaremos todos indignados. Lo poco gusta y lo mucho cansa, reza uno de los dichos más populares que pululan por este país y a raíz de los indignados y reconociendo que tienen razón en algunos, muchos, de los puntos que reivindican, al final digo, a aquellos que somos simpatizantes de este movimiento que entre otras cosas pretende la regeneración ética de la clase política, terminarán por hartarnos con sus manifestaciones radicales que atribuyen a elementos presuntamente radicales pero que asisten a las asambleas.
A más de tres meses de aquel 15M que ilusionó a mucha gente, en vísperas de unas elecciones autonómicas y locales, el globo se ha desinflado y sólo persiste el espíritu de un movimiento social que pretende, como todos, mejorar la sociedad más inmediata dirigida por grupos políticos sumidos en la corrupción y el chantaje social contra el que sólo cabe el activismo desde dentro de cada una de las formaciones o con otra formación que sirva para ello, estructura difícil de conseguir y de alcanzar.
Tras las movilizaciones, las elecciones y el tiempo transcurrido el mayor compromiso para evitar la indignación es el compromiso con algún proyecto determinado, no seré yo quien les diga cual va a ser el elegido, pero en cualquier caso la indignación sólo se combate con el militarismo activo y no con el absentismo y la indiferencia.
La indignación no se combate con la protesta continúa, sino con el compromiso y el trabajo y ello se que es difícil de conseguir, pero no imposible. Está bien patente que si a nivel de pequeñas poblaciones es difícil de desmontar los aparatos de los partidos políticos a nivel autonómico y nacional aún lo es más, pero la mejor forma de conseguir los objetivos fijados es conseguir el poder desde dentro, desde fuera lo único que se puede alcanzar es el objetivo de crear una ONG con subvención de quienes tienen la sartén por el mango.
Ya está bien de manifestaciones contra el Papa o es que no hay “Indignados” católicos, ¿no hay gente que crea en la Iglesia que esté indignada? Por supuesto que si y muchas veces más comprometida con la causa; ya está bien de movimientos asamblearios que no conducen a nada y ya es hora de que el movimiento se demuestre andando.

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