Complejo de vaca (II)

La ONU acaba de emitir un informe en el que nos recomienda cambiar nuestros hábitos alimenticios con el objetivo de comer menos carne de vaca, dado que las ventosidades de las vacas contaminan mucho. Va para dos años escribí un artículo al que titulé "Complejo de vaca"  https://joanllidomeseguer.blogspot.com/2017/11/complejo-de-vaca.html y allí exponía mis pensamientos sobre lo que en su momento había leido.

Ahora, este organismo internacional, muy preocupado por el medio ambiente, reitera lo mismo y, además, nos recomienda cambio de hábitos en la forma de comer. Vaya, mira por donde ahora resultará que un "pedo" de una vaca contamina más que una empresa de altos hornos. Será porque la ventosidad vacuna afectará más al medio ambiente que esas empresas que se instala en la región del Bhopal en la India escapando, de esa forma, a los controles anticontaminación tan exigentes que se utilizan en Europa.

Será que las grandes empresas petroleras no contaminan, que las empresas gasísticas cuidan del medio ambiente o que vertimos al mar aguas limpias y cristalinas de esas macrociudades que se han convertido en un gran enemigo del medio ambiente gracias a los coches, calefacciones, aires acondicionados y un largo etc. de actividades humanas que en ellas llevamos a cabo.

Me hace gracia que quienes utilizan chóferes para sus desplazamientos; aviones particulares para irse de vacaciones a islas paradisíacas; yates para relajarse en alta mar; pisos carísimos pagados por todos los contribuyentes de la ONU, entre los que nos encontramos nosotros; restaurantes de alta cocina con menús no aptos para cualquier ciudadano y otras muchas suntuosidades de su dura y difícil vida cotidiana echen la culpa de la contaminación a las pobres vacas que pastan tranquila y placenteramente por los verdes prados para regocijo de esos caminantes y disfrutadores de paisajes que tanto abundan por nuestras montañas y que no tienen sus posibilidades económicas.

Tras leer lo del referido informe a mí, persona mal pensada, me ha surgido una pregunta ¿Quien ha pagado o propiciado ese informe? Seguro que los ganaderos no habrán sido, pobres desgraciados; seguro que los carniceros tampoco, con lo que ellos tienen derivado de su profesión.

¿Habrán sido los fabricantes de automóviles, las petroleras, la empresas químicas, la empresas que gestionan las nucleares todas ellas con gran poder adquisitivo y capaces de pagar informes de estas características? No lo sé, lo que si sé es que no voy a dejar de comer carne de vaca por que piense que contamina la atmósfera o favorece el cambio climático. Para preservar el medio ambiente seguiré sin ensuciar la naturaleza, procuraré reciclar al máximo y utilizar el mínimo plástico posible, en fín seguiré haciendo lo mismo que vengo haciendo ahora y si mi amigo Viente, el de Rabitas de Nules, me dice de hacer una comida con un chuletón de buey de Asturias, que sepa que allí estaré. y sin ningún remordimiento.

Eso pues, señores de la ONU, el medio ambiente preocupa, pero atinen un poco más y no hagan reir al personal de la calle.