Regeneración de la costa

Ayer leía, con curiosidad e interés que se iba a presentar el proyecto de regeneración de la Costa entre el Sur del Puerto de Burriana y, por lógica, el norte del Puerto de Sagunto, no sin que un fuerte escepticismo se apoderara de mí después de muchos años de anunciarse diferentes proyectos pero sin que se consiguiera nada.

Ahora, veo que se ha hecho algo, no obstante mi escepticismo no desaparece y decido dar un margen de confianza dado que si hasta ahora nada había, ahora ya tenemos algo serio, supongo que científicamente correcto y al mismo tiempo realizable.

Pienso y digo, en ese momento, que no se por qué mañana, los de un lado, aplaudirán con las orejas y los del otro silbaran el estudio por no haberlo encargado y hecho alguien de los suyos; no obstante confío en que cundirá el interés general y que primeramente habrá que conocerlo para, con posterioridad hablar de él y en el supuesto de que no fuera excesivamente bueno para alguna de las poblaciones, entonces presentar las alegaciones oportunas.

Cual fue mi sorpresa cuando a media tarde leo las declaraciones de un alcalde en que ya se pronunciaba sobre el proyecto en unos términos despectivos para lo redactado y quienes lo llevaron a cabo “debo reconocer que espero muy poco de este estudio porque el Ministerio y la Dirección General de Costas nos han demostrado insistentemente que no cuentan con nosotros para nada”. Si estas eran las declaraciones antes de conocer el proyecto, cuales serán las que realizará a continuación.

A los técnicos que redactaron el proyecto, miembros de la Universidad de Cantabria, se les habrá ordenado, supongo, que realicen un trabajo serio, concienzudo, con visión de futuro y que sirva para proteger la costa, el medio ambiente y las posesiones de los ciudadanos. Hasta ese momento, al menos, me mantendré callado a la espera de conocer el trabajo redactado y si favorece o perjudica, a los intereses de la ciudad de cada uno y no a los intereses del partido, como suele ocurrir en muchos casos y no creo que estas afirmaciones lleven un camino diferente.

Hoy, se destapará la caja de sorpresas que tantos años llevamos esperando y yo deseo que lo realizado sea bueno y que beneficie a todos. Hasta ese momento, por respeto a los técnicos redactores, callaré, después hablaré porque “vender la piel del oso antes de cazarlo”, no suele ser muy bueno.