Patrimonio, cada día menos

Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, nos vamos quedando sin patrimonio, los vestigios de nuestro inmediato pasado se va demoliendo ante la mirada impasiva y la desidia de propietarios y autoridades.


 

Después de leído lo anterior alguien pensará que soy un exagerado y que nuestro principal valuarte de la historia y del patrimonio de Burriana, la iglesia de El Salvador, resplandece después de la restauración de la Llum de les Imatges, pero ¿es ese el único edificio que merece ser conservado, respetado y mejorado en todo el término municipal de Burriana.?
El término municipal de Burriana tiene otros muchos edificios que merecerían ser conservados y a través de ellos contar la rica historia de una población que tiene un pasado que deberían conocer sus actuales habitantes y dejarlos para sus descendientes como restos arqueológicos de una ciudad pionera en muchas cosas e incluso en quedarse sin ellas.
Si damos una vuelta por nuestro término municipal encontraremos un sinfín de importantes alquerías antiguas que están en un estado lamentable, torres que dejan mucho que desear, alguna de ellas, la torre Carabona, restaurada hace una decena de años y sumida en el más absoluto olvido,
Les alqueries del Ferrer, l’alqueria del batlle, l’ermita de Sant Gregori, el molí de l’arròs, etc. tienen un estado lamentable. Indudablemente, algunas de ellas son de titularidad privada pero están abandonadas y cuando esto ocurre es cuando debe intervenir la administración pública para establecer unas normativas que impidan su deterioro y su posterior derrumbe como ya ha ocurrido con parte de la alqueria del Batlle o las viviendas de les Alqueries del Ferrer, entre otros.
La historia, en algunos sitios, está compuesta de pequeños retazos que unidos de forma correcta conforman un mucho y un recurso importante, incluso para la explotación turística, algo de lo que muchos “politiquillos” locales se hartan de vociferar sin llegar a tener nada definido, ni siquiera en sus intenciones, después de una victoria electoral.
Nos quedamos sin patrimonio, pero no tenemos prisa, poco a poco las centenarias piedras que vieron como los viñedos de nuestro término municipal dieron paso a los naranjos y como estos van dejando paso a otras cosas, entre ellas la falta de rentabilidad de nuestro sistema agrario actual, esas piedras, digo, que pasaron de la horizontalidad de la tierra a la verticalidad del cielo, vuelven poco a poco a su posición original demoliendo lo que los burrianenses no sabemos conservar.
Nuestro patrimonio se desmorona, ante la impasividad de nuestros responsables y de algunos de sus propietarios, el tiempo, que no pasa en balde nos lo demandará y nosotros no sabremos que contestarle, pero tampoco tendremos nada que enseñarles a nuestros descendientes. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Jenaro y no Genaro

Sr. Alcalde de Burriana – Borriana, això no es res per al mal que el Sr. Albiol farà a la cultura del seu poble.

Burriana no puede perder tantos trenes