Suerte Messi allá donde vayas. Te la mereces.
No soy aficionado al fútbol, pero esta decisión me duele. Me sabe mal que la haya tomado por el bien de este deporte que en este país tiene tantos militantes. Me da pena que haya decidido tomar una determinación de esas características, pero si analizamos muchas cosas, deportivas y no, no me extraña que haya concluido así, alejándose de todo aquello que en los tres últimos años le ha hecho distraerse del fútbol. Si. Estoy refiriéndome a Messi.
Además de no ser
aficionado a este deporte y mucho menos de ser “culé” o “anti”, que en este
país siempre nos definimos a favor o en contra, me sabe mal que acabe su
carrera fuera del Barça, porque este chico ha sido, a lo largo de docena y
media de años futboleros, el buque insignia de una nave que ha navegado a
caballo de una afición que lo adoraba y de unas directivas que lo envidiaban
por no ser ellos quienes representaban a este club de fútbol.
Personalmente,
siempre me ha caído bien. Discreto, sencillo, poco interesado en meterse en
batallas patrióticas o de otra índole, trabajador y pese a que tuvo un pequeño
encontronazo con la hacienda pública, más atribuible a otros que a él mismo,
zanjó el tema pasando por ventanilla y caso cerrado. Digo pues que con su
marcha no va a perder su propio equipo, sino todo el fútbol español, en estos
momentos falto de lideres claros y con un personalismo entre los directivos de
equipos, federación y clubes que raya la indecencia.
Da la sensación que
desde hace unos años a las directivas de los clubes han llegado tantos arribistas
como a la política, pero no quiero mezclar ambas cosas aunque, de por sí, ellas
se mezclen solas.
Pues eso, me sabe mal
que te vayas. Anteriormente lo hizo tu adversario Cristiano, otro grande del
fútbol mundial, y ahora, posiblemente, volváis a enfrentaros en la liga
italiana con la misma asiduidad y frecuencia que lo hacíais en la española,
pero a nosotros ya no nos llegará su eco de la misma forma.
En fin, eso. Ellos se
lo han buscado después de tanto presionarte para algunas de las causas que han
surgido en los últimos años en Catalunya y que resististe con firmeza. Ellos,
además, se lo han merecido, y tu partida, sin duda alguna y si tienen vergüenza
será el punto de inflexión para la caída al barro de un grupo que te envidió de
forma intensa y que no ha sabido cuidar y, en muchos casos, apreciar lo que han
tenido. Eso pasa muchas veces.
En cualquier caso y
allá donde vayas te deseo lo mejor porque considero que eres una persona
honesta en tu trabajo y te esfuerzas por mejorar. Hasta siempre Messi
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