"El regalo" un buen regalo para esta Navidad o Reyes
Acabo de leer un libro que se titula “El
regalo” y su escritor es el castellonense Eloy Moreno, si, ese que hace unos
cuatro años escribió “el bolígrafo de gel verde”, libro este que no he leído, a
pesar de que en su día escuché buenas críticas y se de algunas librerías a las
que visitó el propio autor ofreciendo su creación al no disponer de
distribuidora.
He leído, digo, su última creación literaria
y me ha parecido un buen trabajo, fácil de leer, engancha con el paso de las
hojas y la apariencia de rareza inicial entremezclando raras situaciones y
extraños personajes tienen una finalización hermosa que concluye con un
desenlace que te deja pensativo, un poco como la película Kramer contra Kramer
de la que sigo pensando el desenlace de los Kramer.
Sin embargo, la lectura de la carta es un
relato fidedigno de lo que a muchos nos ocurre y es que, a veces, muchas veces,
nos faltan las palabras para expresar los sentimientos del corazón; nos falta
la decisión de reproducir por la boca lo que piensa nuestro cerebro.
Es como si tuviéramos vergüenza de de decir
esa palabra tan hermosa y que tanto escuchamos en muchas películas, en libros
literarios, en la poesía y en la música; no falta la determinación de decir
algo tan sencillo como “te quiero”.
Está claro, que muchas veces se demuestra con
hechos, pero a todos nos gustaría que nos lo dijeran; a todos nos gustaría que
nos dieran un fuerte abrazo lleno de amor y ternura y, en cambio, a veces ese
abrazo es superficial, le falta ese impulso que transmite el amor y cariño
verdadero, ese que dice la canción que ni se compra ni se vende.
Las últimas páginas del libro, en las que se
produce de forma rápida y precipitada el desenlace de la obra une todos los
cables sueltos de una lectura que deja muchos al descubierto, sin embargo la
lectura de la carta vale la pena releer más de una vez para darnos cuenta del
tiempo que vivimos, la trascendencia de nuestras acciones y la importancia de
nuestras relaciones con las personas que queremos y de los “ruidos” que hay en
la sociedad moderna que nos distraen de la realidad de la vida. Y más en estos
días de Navidad.
Comentarios
Publicar un comentario