Falla el sistema. ¿Sólo el sanitario?
Querida Rosa. Supongo que a ti te pasará igual que a mí y a otra conocida mía cuando pido un cita telefónica con el médico de cabecera y es que para esa consulta telefónica a mi amiga le han dado para trece días y a mí para dieciséis días con sus mismas noches.
La verdad es que es, un poco, para echarse a llorar. No
contento con eso intento solicitar una cita presencial para otra persona, que
tiene como médico al mismo profesional, y me da cita para catorce días desde el
momento en que lo pido. De pena.
Imagínate que estoy resfriado o no me encuentro bien en
general y pido una cita a mí médico y me la dan para catorce días. ¿Cómo voy a
estar dentro de ese tiempo? Que solución tomo. Voy a urgencias y, entonces se
colapsan las urgencias porque un resfriado no es para ir a urgencias. ¿Qué
hago? Si la cosa no está clara me derivarán al Hospital de la Plana que es mi
hospital de referencia.
Llego allí. Triatge, en veinte minutos hecho. Luego pasa
el tiempo, a veces hasta más de una hora. Me visita el médico y me pone en un
box, al rato me indica que van a hacerme un análisis, una hora más para hacérmelo
y otra para el resultado. Ya van tres horas. A continuación deciden ponerme un
suero para aliviarme el dolor, menos mal.
Llega el análisis. Todo normal. No vemos nada extraño, a
pesar de que he venido quejándome de síntomas de un cólico de riñón. Le haremos
una ecografía. Mientras, una hora más para hacérmela y otra hora para
interpretármela.
El servicio bueno. Los médicos y las enfermeras amables.
En la sala de espera no había ni mucha gente ni en los boxes demasiados
enfermos. En total estuvimos allí desde las cinco y media de la tarde hasta
casi las cuatro y media que entrábamos en casa. Al final todo quedó en una
pequeña infección, tratamiento de diez días y a casa.
Diez horas en urgencias y catorce días para que me visite
mi médico de cabecera. Creo que algo falla y que esto que cuento y que pongo en
primera persona puede haberme ocurrido a mí mismo pero, con toda seguridad le
puede ocurrir a cualquier de los que puedan leer este texto y a muchos más que
no lo van a hacer.
Falla el sistema. ¿Sólo el sanitario?
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