Optimistas deseos para el año que empieza
Como ya dije en el artículo anterior, la lotería no nos tocará si no jugamos a ella, pero es que, un año más, aún jugando no nos toca y es que todo es cuestión, pensamos, de mala suerte, aunque la realidad es tozuda y si nos miramos a nosotros mismos y a nuestro alrededor, veremos que la suerte nos toca todos los días, cada jornada que vivimos y sabemos disfrutar de las pequeñas cosas y placeres que nos ofrece la vida. Y digo esto, obviamente, porque no me ha tocado la lotería ni a mi ni a ningún conocido mío. Una pena, porque todos nos hubiéramos alegrado. Después de todo aún nos queda salud y, salvo algunos pequeños achaques, gozamos de buena salud, esa salud buena que nos deseamos después de que nos enteramos que no nos ha tocado la lotería; porque si encima de gozar de buena salud, nos toca la lotería, ya sería la “leche”, pero en fin a seguir jugando y confiando en algo que estadísticamente tiene pocas probabilidades de que nos toque, aunque siempre toca a alguien que tiene tus...