¿Transversalidad en la oposición?
Hoy voy a terminar esta trilogía sobre la transversalidad en
el hemiciclo municipal de Burriana y en esta ocasión le toca el turno a la
oposición, el único espacio político en el que existe una transversalidad total
al repartirse las funciones perfectamente y delegar en una única fuerza política
toda la acción de crítica al equipo de gobierno aunque sea saltándose todas las
reglas éticas y recurriendo, si cabe, a la demagogia.
En el tripartito opositor la transversalidad, por cierto una
de las pocas palabras que se puede escribir de dos formas con un mismo
significado, transversal y trasversal, es total dado que las tres formaciones
políticas delegan su acción contra el gobierno municipal, al menos de cara a la
galería, en el Partido Popular dado que tanto Ciudadanos como Cibur apenas aparecen
en los medios, todo ello a pesar de que en el Pleno los temas urbanísticos
están, aparentemente, delegados en la representante de Cibur que es la única
que se entera de estas cuestiones y la frase más destacada de la representante
de Ciudadanos es “como ya ha dicho el portavoz popular”, no en vano es la
última en intervenir y la mayor parte de las veces sólo tiene que corroborar lo
que han dicho las dos formaciones que le han precedido.
Así pues, al menos en la oposición si que vemos
transversalidad en la acción y a través de ella se puede detectar la lucha de
poder interna que existe en el Partido Popular en el que, a veces, vemos
apariciones públicas de dos concejales refiriéndose al mismo tema y con uno o
dos días de diferencia, algo que denota que las elecciones están a la vuelta de
la esquina y que hay que chupar cámara para conseguir un puesto destacado en la
lista.
Queda poco para finalizar agosto, un mes que este año termina
con el inicio de las fiestas de la Misericòrdia, y que será el preludio de un
otoño muy caliente a todos los niveles y en el que, algunos, deberán correr
para hacer los deberes que no han hecho a lo largo de esta legislatura y otros
tendrán que reubicarse, reagruparse y, sobre todo, espabilarse para que llegue
la fecha y todo esté preparado.
En el próximo artículo hablaré de candidatos.
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