La siempre mejorable próxima edición
Se acabó. Ha finalizado el Arenal Sound 2018. La novena
edición, previa a una décima, ha terminado como se suelen hacer las cosas por
aquí con un remate final a base de fuegos de artificio.
Eran, aproximadamente, las seis y media de la mañana cuando
se escucho este remate de pólvora y fuego que anunciaba dos cosas, por un lado
el amanecer y por otro que todo había acabado y que daba comienzo la edición
del próximo año la cual, supongo, tras los análisis pertinentes sobre la
evolución de la presente edición, tendrá que agregar innumerables mejoras de
todo tipo y, especialmente, medioambientales.
Y digo esto porque, por más que se quiera hay que concienciar
a los asistentes, desde el momento en que compran la entrada, que no hay que
ensuciar, que hay que respetar muchas cosas y sobre todo a las personas.
Creo que ha sido una buena edición, mejorable en grupos y
otros asuntillos, pero es lo que hay, dado su coste. Creo que hay que mejorar en
calidad a todos los niveles y ello, inicialmente, se consigue de varias formas,
entre ellas la del precio, no en vano el segmento de público es el que es,
entre otras cosas por el precio; los comportamientos, a veces, son los que son,
entre otras cosas por el precio y otras muchas cosas que pasan ocurren por lo
mismo. El precio.
Si. Hemos estado ahí. En todos los medios nacionales y
extranjeros; vistos, oídos y leídos y ello nos puede repercutir en un mucho que
no sabemos aprovechar; en un nada que no sabemos transformar y en un futuro con
nada por no saber proyectar y ahí es donde voy. Al turismo.
Se lo que es un festival y a lo que la gente acude al mismo y
no pienso cosas raras. La gente que viene al festival de Burriana son gente muy
joven que tiene ganas de divertirse y deja de lado muchas cosas, con lo cual
organizar actividades “durante” es muy complicado como no sea desde dentro de
la organización, pero habría que aprovechar el tirón hacia otros campos.
Pero bueno no es de eso de lo quiero hablar ahora, quiero
hablar del festival, de ese festival que pese a todo sigue de espaldas a
Burriana; de unos organizadores que sólo les interesa el resultado final, cosa
por cierto muy lícita, y que, además, están todavía revestidos de similar
prepotencia que les caracterizó desde el comienzo de esta hermosa y mejorable
historia.
Creo que hay seguir mejorando y tratando a los burrianenses y
a quienes nos representan con respeto y firme decisión de continuar este asunto
con más visión de futuro y menos cortoplacismo por parte de unos y menos temor
a las críticas por defender su sillón y a todos los burrianenses.
Deseo que todos quienes estuvieron con nosotros hayan llegado
bien a sus casas, que hablen de lo bien que les hemos acogido, que difundan el nombre de nuestra ciudad y que esperen con ansia la siempre mejorable próxima edición.
Comentarios
Publicar un comentario