¿Creo que se les va la olla, o es a mí?

Leo, con cierto estupor, que el Ayuntamiento de Burriana invertirá 250.000 euros, del ala, en la apertura al público del refugio de la guerra civil cuyo acceso se sitúa frente a la puerta de la iglesia de los PP. Carmelitas y que discurre hacia el Camí d’Onda.

La primera vez que leí el titular, no llevaba gafas, me pareció digno del día de los inocentes. Tras buscar las lentes procedí a leerlo con detenimiento y me dí cuenta que no era broma que, incluso, había declaraciones de un concejal, con lo cual, la información parecía que iba en serio y con visos de que se hiciera realidad.

En una ciudad con un centro urbano de pena, unos caminos rurales lamentables, unas entradas a la población muy mejorables y muchas otras necesidades pendientes, pensar gastarse 250.000 euretes en abrir un refugio para regocijo de ciudadanos y visitantes. Para mí, es esperpentico.

Creía que nuestros actuales gobernantes tenían un poco de “senderi”, pero si la información va en serio y se ejecuta, creo que ya he terminado de votar a una de esas opciones políticas progresistas en toda mi vida. Yo quiero otro progreso.

Considero que los últimos veinte años anteriores a la llegada del actual equipo gobernante no dieron a Burriana la razón de ser que se merece; que no se adelantó lo que debiera, que algunos calentaron o siguen calentando una silla, simplemente, por un sueldo y no por el interés de la ciudad que los eligió, pero que, ahora, se piense en lo que se piensa cuando hay tantas necesidades urbanísticas, sociales, culturales y deportivas para gastar esa cantidad de dinero en tal menester, creo que se les ha ido la olla.

Si, así de claro, se les ha ido la olla. Si no saben que hacer con tanto dinero, yo, y muchos más, les podríamos dar algunas ideas, tales como cambiar el asfaltado de muchas calles, Escorredor, Raval, Santa Cristina, etc. Poner en condiciones El Pla, hacer un aparcamiento público decente o asfaltar el carrer Serratella o terminar la urbanización que se encuentra detrás del colegio Villafatima, además de asfaltar caminos rurales o acondicionar las zonas verdes actuales o las esculturas que hay en algunas plazas cuyo estado es bastante lamentable.

Hay más cosas. Establecer subvenciones para que los vecinos del centro rehabiliten las viviendas de interés general, abrir el Museu de la Taronja y un largo etc. de necesidades más necesarias y útiles que gastar tal cantidad de dinero en abrir el refugio para visitas.

No sé, me da a mí que es un muestra más del desconcierto y falta de proyecto de ciudad del equipo de gobierno, a pesar del acierto que han tenido en la carretera del puerto.

En fin, eso, que creo que se les va la olla, o es a mí