Hay los mimbres que hay y ¡vaya lo que hay!
Hace unos días un
amigo me comentaba, con referencia a la confección de las listas que
concurrirán a los próximos comicios municipales, que se hacían con los mimbres
que se tenían y, hasta ese momento todavía no se conocían las listas del PP,
cosa que ya se sabe ahora y tras esa definición y el conocimiento de los
nombres de los integrantes de esta lista me atrevo a decir que si que se tienen
pocos mimbres en algunos partidos políticos, aunque sean mayoritarios.
Escribo estas líneas veinticuatro
horas después de conocer los nombres con el objetivo de ponderar y no escribir
en caliente tras ello. Intento ver lo que venden de renovación y juventud,
nuevas ideas y otras cuestiones que se alegan para intentar calar en la
población, pero no dejo de entrever cuotas de poder y poder real; entreveo
quien ha mandado a la hora de elaborar la lista y quien va a mandar en la
próxima legislatura y, además, la capacidad real de trabajo, que no de puestos
de trabajo, de los integrantes de la misma.
A veces, hay quien
confunde la velocidad con el tocino y en es este caso así ha sido y se han
confundido los intereses personales con los generales y lo que Burriana
necesita y lo digo nuevamente es un equipo experto, capaz, dispuesto,
conocedor, con ideas y con visión, nada sesgada, de un futuro que está por
venir y que no va con la edad.
No sé si el colectivo
“Despierta Burriana” conseguirá que esta ciudad nuestra despierte, pero, me
duele decir lo que voy a decir, con los mimbres de la próxima legislatura no
haremos ninguna cesta que sea capaz de albergar los ilusionantes proyectos que
una ciudad como esta requiere; no conseguiremos desarrollar las muchas
posibilidades que siempre vengo diciendo que posee de desarrollo turístico, social
histórico, etc. y que, todavía, están por poner en valor.
No es cuestión de
nombres ni de currícula; apenas nada tienen que ver las siglas y mucho menos su
preparación física; ni de poses en plan “barbie” ante las cámaras; ni de
estilos en llevar el cirio o la vara de mando; es cuestión de efectividad y
mucho me temo que dejará mucho que desear.
Si llevamos ya varias
“legislaturas perdidas”, no me gustaría que la próxima fuera una más. Burriana
no se lo puede permitir.
En fin, que tras esto
y discutirle a mi amigo y que yo creía que si lo trabajaban podrían hacer una
lista competente y capaz, no tengo más que darle la razón y creerme lo que me
decía que hay los mimbres que hay y efectivamente, hay lo que hay.
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