Por encima de nuestro sexo


Es sábado por la noche. Llego a casa tras un día agotador en el que mi mayor esfuerzo ha sido ir de boda con mi esposa y unos amigos a celebrar el enlace de la hija de unos amigos comunes a mí y a esos amigos con los que he ido de boda. Llego a casa y nos sentamos a ver la TV, esa antigua caja tonta reconvertida para la modernidad en una delgada pantalla de plasma en la que no dejan de hablar de del tema de la semana, el feminismo.

Tras la primera cabezada, empiezo a escuchar lo que un@s dicen al respecto. Un@s dicen unas cosas y otr@s dicen otras. Defienden unos postulados u otros. Atacan o defienden posturas diversas sobre lo acontecido esta semana respecto de este tema sin llegar a lo que, desde mi punto de vista es un factor importante para salvar un problema inexistente si imperara el respeto más que la tan anunciada diversidad.

Desde mi consideración, más que en las brechas, el problema estriba en el respeto. Y es que nadie somos iguales a nadie. Todos somos diferentes a todos y más que apreciar en la diferencia, tenemos que apreciar en el respeto. Yo puedo admitir la diferencia entre dos personas y, sin embargo, no respetarlo. Yo, particularmente, prefiero que me respeten a que me consideren diferente, cosa que sin lugar a dudas se que soy.

Y, es que, soy diferente a mis hermanos, mis amigos, mi esposa, mis hijos, pero, sin embargo, es en el respeto en donde se encuentra la diferencia y no en la propia diferencia.

Me harto de escuchar las sandeces que un@s y otr@s dicen por la pantalla defendiendo unos posicionamientos u otros y acabo apagando la misma y viniendo a esta otra pantalla a escribir estas palabras que me reafirman en lo que pienso y es que nadie debemos valorarnos por la diferenciación, sino por el respeto que un@s y otr@s nos tengamos por lo que somos, valemos y nos hacemos respetar como personas y, sobre todo, por encima de nuestro sexo.

Mientras, a lo lejos escucho y veo los castillos de fuegos artificiales que en Castelló anuncian que se aproxima el fin de su semana dedicada a las fiestas fundacionales de las que apenas quedan unas veinticuatro horas para su Vitol.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Jenaro y no Genaro

Burriana no puede perder tantos trenes

Sr. Alcalde de Burriana – Borriana, això no es res per al mal que el Sr. Albiol farà a la cultura del seu poble.