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A pesar del resultado y de la decisión tomada hay, todavía, muchos militantes socialistas que no se dan cuenta de la política bastarda y barriobajera de Pablo Manuel Iglesias, y su mayor o menor séquito, para con el partido en el que militan contra quienes ha remetido, más y mejor, que contra el adversario que es, para ambos dos, el Partido Popular.

Desde mi, todavía, no militancia en ninguna formación política, me atrevo a decir que se ha adoptado el menor de todos los males en este sistema democrático que es a la vez, el menos malo de todos los sistemas.

Que no se puede investir a ese Partido Popular, es un hecho, pero que entre todos han fustigado al Partido Socialista es un hecho que, ahora, puede corroborarse con la decisión tomada en beneficio de una estabilidad nacional que nadie, ni el Partido Popular, es capaz de tomar, simplemente, cambiando a su cabeza de cartel.

Seguramente, conociéndome, si fuera diputado socialista me costaría muy mucho abstenerme para que Rajoy fuera presidente de gobierno y presidente de un partido del que no se ha enterado lo que pasaba en su interior con todos los casos de corrupción, malversación, etc. que no voy a seguir refiriendo pero, muy probablemente, antepondría los intereses generales sobre los particulares o los de partido.

Sé que muchas de sus señorías diputad@s socialistas se pondrán una pinza en la nariz para no saltarse la disciplina de partido pero, siempre los peros …., a pesar de los ataques infernales que se les va a lanzar desde ese partido que cuando tuvo la oportunidad de votar a un presidente socialista prefirió votar en contra antes que votar un gobierno de progreso que ahora demandan, digo pues, que serán muchos los ataques que se les van a hacer, pero tienen que saber explicar lo que han hecho, aún, en contra de su voluntad. Algo así como cuando explicaron lo del “OTAN de entrada NO”, y es que, a veces, el no rotundo nos lleva a lugares desconocidos, inicialmente, que luego resulta que son provechosos. Y no lo digo por lo de la NATO.

Oigo, también, algún@s exparlamentari@s-exdiputad@s socialistas que lanzan improperios contra quienes han tomado esta decisión y algunos de ellos deberían pensarse lo que dicen, máxime, cuando han estado sentados muchos años en unos escaños que han procurado, principalmente, que nadie se lo quitara y calentando un sillón desde cuyo respaldo han dado una escasa productividad y nula visión de futuro y “aquellos polvos, no se olviden, trajeron estos lodos” o es que piensan que les hubiera ido mejor con unas nuevas elecciones. Lo dudo. O, tal vez, lo que querían es que en las terceras elecciones el Partido Popular sacara mayoría absoluta y pasara, nuevamente, el rodillo electoral.

En fin, eso mucha suerte. La suerte del Partido Socialista, será un poco o un mucho la suerte de todos. Y tras decir esto, mi amiga Rosa dirá, como te metes en este berenjenal, pero es que tú ya sabes que me gusta meterme en algún que otro charco y este es uno nuevo.