No todo son malas noticias
Los atentados de París y, en definitiva la situación internacional, ha hecho que me despistara, un poco, para escribir un artículo esta semana y es que el mundo está muy revuelto y, a veces, pienso que no sé si vale la pena hablar de nada, total no solucionamos nada o mejor dicho la impotencia ante la resolución de los conflictos, las situaciones o la ineficacia de quienes nos gobiernan me hacen dudar, incluso, de mis buenas intenciones. Menos mal que esta semana, distraído de la actualidad municipal como he estado, mi amigo el Doctor Carajillo, reconvertido en Jaimme Verdeguer para ese patio de vecinas que es Facebook, me ha reportado y refrescado esta memoria con una serie de pensamientos y razonamientos que me han alegrado muchas mañanas y algunas tardes. En fin, que el patio no está para tirar cohetes, aunque los cohetes, petardos y pepinos se los están endosando a quien, en nombre de un Dios, que ellos denominan de otra manera, andan sembrando el horror en tierra ext...